Cada marca tiene un mercado objetivo diferente, y su reto es identificarlo y conocerlo de manera superior, con el fin de poder acertar con las estrategias de producto, comunicación, precio y distribución que mejor lleguen al target.

 

Hoy, particularmente, me enfocaré en un público complejo que son los niños-jóvenes que están entre los 9 y los 13 años de edad. Son difíciles porque aunque cumplen con algunas características propias del mercado infantil, no pueden considerarse del todo en este segmento; e igualmente, aunque comparten algunos rasgos de los jóvenes y adolescentes, tampoco pueden abordarse como este target, pues no son aún parte de él.

 

El punto de partida para definir a estos chicos, es que son niños que no quieren ser tratados como tales, por lo tanto es justo ahí donde viene el primer tip para las marcas que se dirigen a este público: La comunicación no puede ser infantil.

 

Los passion points del target en cuestión son dos: el juego y la competencia, así que el tip número dos es tener muy presentes estos grandes motivadores cada vez que la marca quiere realizar una activación o una actividad promocional.

 

Lo mejor para los chicos es el reconocimiento y la aceptación social en su grupo de amigos (no el grupo familiar), por lo tanto el tip tres es: Comunicación siempre orientada al reconocimiento y al logro, y personalidad de marca de pertenencia.

 

Tip cuatro: Evitar al máximo temas relacionados con la rutina y las tareas, ambas son torturas para el mercado objetivo.

 

Finalmente, el tip cinco hace referencia al foco comunicacional de las marcas que van a este target, el cual no es otro diferente a recuperar la diversión, que cada vez más pierden estos niños-jóvenes, debido a las tareas escolares, las responsabilidades del ambiente familiar y las nuevas obligaciones que empiezan a adquirir en la vida.

 

Ya lo saben: 5 tips y un solo mercado objetivo.

 

 

Juliana FIRMA