Desigual es una de mis marcas preferidas, y tiene los colores y el arte de Barcelona (la ciudad que es sede central de la marca) en cada una de sus prendas.
 
Esta marca española del sector textil, confección y moda, se caracteriza por sus colores vivos y estampados optimistas que resaltan el lado amable de la vida. Desde 1984 que fue su origen, los hermanos Christian Meyer y Thomas Meyer buscaban darle al consumidor una alternativa para “vestirse de forma diferente, con prendas frescas y divertidas a buenos precios” fue así como eligieron el slogan “la Vida es Chula” que hasta hoy los acompaña.
 
Con sus tiendas 9.000 tiendas multimarca (cuyas principales plazas son en Barcelona, Madrid, Nueva York, Berlín y Amsterdam), 2.200 secciones en tiendas departamentales y 3.800 empleados de 85 nacionalidades diferentes, buscan que haya al menos una prenda Desigual en todos los armarios del mundo.
 
Así mismo, lejos de definir su misión como muchas marcas de su categoría: “ropa y accesorios para dama, hombres y niños”, Desigual declara su quehacer de una manera bastante original: “Creando emociones positivas a través de ropa original, con color y de calidad para todos, con una misión: compartir la alegría, el amor a la vida y su espíritu poco convencional”
 
¡Que sigan los colores del Mediterráneo y que viva la experiencia “Desigual, no es lo mismo”!