Se ha vuelto muy común hablar de la ola Fitness que se ha venido apoderando de la mente del consumidor y de cómo se deberían adaptarse las marcas a este cambio. Pero hay marcas que les queda muy difícil ser Fit.
Por más que Coca-cola lance su Coca-cola Zero o McDonald´s lance su línea de wraps y ensaladas no van a dejar de ser marcas relacionadas con sobrepeso. Pero no son solo estas dos marcas las que tienen el pequeño inconveniente de que el consumidor tenga como meta número uno reducir el consumo de azúcar en su dieta, son cientos más las que batallan día a día contra este problema.
¿Pero cómo combaten este problema? ¿Cuál es la tendencia del mercado en este tema?
No se sorprenda si algún día va a almorzar el famoso “Corrientazo” y le ofrecen una Mini-Bandeja Paisa.
Llegamos a la era MINI.
Mini latas de gaseosa, Big mac junior, Whopper junior, Oreo jro y todo lo que consumías antes pero Jro. Dándote la posibilidad que sigas con tu dieta pero que puedas saciar esas ganas de pecar que tienes con una versión pequeña, una sin tantas calorías. De esta forma contrarrestan esta tendencia del consumidor de no adquirir sus productos porque van en contra de sus dietas.
Pero esto no lo soluciona todo, solo juega con la baja fuerza de voluntad de algunos consumidores; la verdadera solución a la que responde el mercado es TRANSPARECIA.
La palabra “dieta” ya no la utiliza nadie y es porque el consumidor ya no cree en ella, lo que el consumidor en realidad quiere, es saber el número exacto de calorías, azucares y carbohidratos que tiene el producto que va a adquirir y que no le escondan nada.
Y no solo funciona en el sector de Alimento y Bebidas, el consumidor cada vez tiene más acceso a la información lo que lo hace más inteligente y más susceptible al momento de detectar que las marcas le esconde información o en el peor de los casos, le mienten.