Tras la estrategia de Burger King de lanzar al mercado japonés hamburguesas de color negro y luego de color rojo, la cadena internacional KFC decide también hacer uso de la teoría del color como parte de su portafolio. En esta oportunidad se trata de las hamburguesas rosada y negra lanzadas en China, las cuales, no solo son una respuesta a un competidor o seguir una tendencia, sino también una táctica que busca generar noticia e incrementar las ventas de KFC en China que vienen decreciendo en los últimos años.

 

Según la teoría del color, el rosado es sinónimo del amor, feminidad y ternura, entre otros. Entretanto el negro significa elegancia, solemnidad, misterio y hasta luto. Así las cosas, esta estrategia arroja un doble análisis: por un lado, se lleva los aplausos al tratarse de originalidad, generación de free press y WOM. Por otra parte, cabe cuestionar el éxito del producto en cuanto al consumo y a la recompra, pues el cambio del color afectará la percepción del sabor, y es claro que el cambio del sabor percibido en el consumidor es un tema bastante delicado en las marcas de la categoría de alimentos y bebidas.

 

 

Juliana FIRMA